- Nombre / Agencia
- Marina (Harem)
- Precio
- 350
- Tiempo acordado
- 30 minutos
- Forma de pago
- Efectivo
- Anticipo
- No
- Rostro
- 3,00 estrella(s)
- Imagen (Photoshop/Filtros)
- Más skinny que en fotos
- Busto
- 2,00 estrella(s)
- Cuerpo
- 4,00 estrella(s)
- Actitud
- 5,00 estrella(s)
- Edad aproximada
- 27
- Trasero
- 4,00 estrella(s)
- Besos
- Picos
- Oral
- 4,00 estrella(s)
- Atención a los huevos
- No
- Oral con baba
- No
- Oral a ella
- No
- Oral natural
- No
- Anal
- No
- Extras
- No pregunté
- Desempeño Sexual
- 3,00 estrella(s)
- Repetirías/Recomendada?
- Sí, pero no pronto
Después de ver los estados de WhatsApp de la casita y leer los comentarios aquí escritos sobre su extrema delgadez, se activó mi modo lujuria mórbida y me animé a conocerla. Efectivamente, es la antes conocida como Kenia (¿O Kendra?) de Miriam VIP, y ya desde entonces había recibido un buen trato de ella, lo que no siempre es usual en esa casita, conocida como la puerta blanca.
Ya en Harem noté que sí bajó extremadamente de peso. Para quienes buscan carne firme para tocar, no es ahí. Es más que flaca, más que skinny, ella de verdad tiene un problema que podría hacer pensar que se trata de anorexia o de amor al crico. No obstante, algunos colegas y yo compartimos una extraña fascinación por este tipo de flacas.
Comencé succionando sus bubis, algo tristes pero disfrutables, quizá son las que más han sufrido su pérdida de peso. Noto, sin embargo, que cierra los ojos, se deja llevar y se estremece un poco por mis lamidas en sus pezones. Le pido un beso, pero me dice que no los da, aunque hice mi puchero y me concedió unos poquitos, pero ya después me los negó. Su rostro no es feo, de hecho se veía medianamente atractiva en Miriam, sólo que sus mejillas chupadas la hacen ver con un poco más de años de los que tiene.
Algo que se mantiene rico son sus nalgas, que aunque disminuidas, han permanecido estoicas y algo paraditas ante la adversidad. Las acaricié con intensidad, con sus caricias superficiales al ano...se sacaba un poco pero le dije que no metería el dedo y ya no chistó.
Pasando a la actividad física vigorosa, la tomé de perrito y el morbo de tener así a una morra tan flaquita me prendió. Cambiamos y me la mamó con condón un rato: bien chupado, con succión, sin llegar a ser genial pero sí con dedicación.
Terminé de misionero y nos despedimos. En todo momento amable.
Ojo, no es la más hermosa, tampoco es la mejor cogiendo (más bien es sumisa, lo cual tiene sus ventajas), pero mientras la trates suave se deja llevar y ratos parece que lo disfruta.
Ya en Harem noté que sí bajó extremadamente de peso. Para quienes buscan carne firme para tocar, no es ahí. Es más que flaca, más que skinny, ella de verdad tiene un problema que podría hacer pensar que se trata de anorexia o de amor al crico. No obstante, algunos colegas y yo compartimos una extraña fascinación por este tipo de flacas.
Comencé succionando sus bubis, algo tristes pero disfrutables, quizá son las que más han sufrido su pérdida de peso. Noto, sin embargo, que cierra los ojos, se deja llevar y se estremece un poco por mis lamidas en sus pezones. Le pido un beso, pero me dice que no los da, aunque hice mi puchero y me concedió unos poquitos, pero ya después me los negó. Su rostro no es feo, de hecho se veía medianamente atractiva en Miriam, sólo que sus mejillas chupadas la hacen ver con un poco más de años de los que tiene.
Algo que se mantiene rico son sus nalgas, que aunque disminuidas, han permanecido estoicas y algo paraditas ante la adversidad. Las acaricié con intensidad, con sus caricias superficiales al ano...se sacaba un poco pero le dije que no metería el dedo y ya no chistó.
Pasando a la actividad física vigorosa, la tomé de perrito y el morbo de tener así a una morra tan flaquita me prendió. Cambiamos y me la mamó con condón un rato: bien chupado, con succión, sin llegar a ser genial pero sí con dedicación.
Terminé de misionero y nos despedimos. En todo momento amable.
Ojo, no es la más hermosa, tampoco es la mejor cogiendo (más bien es sumisa, lo cual tiene sus ventajas), pero mientras la trates suave se deja llevar y ratos parece que lo disfruta.