exone
Nuevo
- Nombre / Agencia
- jimmys
- Contacto
- suggey
- Precio
- 1400
- Tiempo acordado
- 1hr
- Forma de pago
- efectivo
- Anticipo
- no
- Rostro
- 2,00 estrella(s)
- Busto
- 4,00 estrella(s)
- Cuerpo
- 3,00 estrella(s)
- Actitud
- 1,00 estrella(s)
- Edad aproximada
- 40
- Trasero
- 2,00 estrella(s)
- Besos
- No doy besos
- Oral
- 2,00 estrella(s)
- Atención a los huevos
- no
- Oral con baba
- si
- Oral a ella
- no
- Oral natural
- no
- Anal
- no
- Extras
- no tiene
- Desempeño Sexual
- 2,00 estrella(s)
- Repetirías/Recomendada?
- jamas
Llegué al Jimmy’s con la emoción ridícula al estilo actor porno
Llevaba MESES detrás de Suggey, la famosa suggey, y siempre estaba ocupada, o desaparecida como carta rara de colección.
Hasta que a inicios de noviembre, por fin, POR FIN, se me hizo.
Me sentí como si hubiera ganado un premio… y pues resultó que no.
Me meten al cuartito, prendo mi toque de mota para agarrar valor y en eso entra EL REFRIGERADOR HUMANO, tripona, sólida, con un perfume tan dulce que parecía que me estaba rociando jarabe para la tos.
Nomás entró y me dio un golpe de olor .
Y con actitud de cajera de Oxxo en su último día laboral me suelta:
—Aquí no se fuma, es una falta de respeto y se quedó ahí un rato a que el humo se fuera
Yo ahí nomás con los pinches cachetes y pecho lleno reteniendo el humo del pinche mega jalón que le di y con mi cara de nmms! primera vez que me dicen eso jaja normalmente me dicen saca sordo , onde la guardaste, ta buena etc .
Le digo que en el foro la recomendaban un chingo, que por fin me tocó cita con ella, que ya tenía rato queriendo…
Y la morra, bien seca:
—Ah, pues yo ya no manejo extras. Todo es con preservativo y se que perdere cliente, se me hizo una actitud culera la neta, por que no aviso antes de pedir una hora
Y yo dentro de mí viendo mi alma desmoronarse como galleta Marías en café.
Noviembre, día libre, yo ilusionado como idiota…
y me sale con esa.
Pero ahí no acaba.
Se pasó LA HORA COMPLETA con plática de sermón: de su vida, sus hijos, su rutina, , su vecina peleonera…
Yo ahí recostado pensando:
“Morra, vine por una experiencia de revista, no por consejos familiares.”
Termino y ya lo único que quería era irme.
Y todavía:
—Espera a que me bañe y te acompaño.
Yo sentado viendo el piso, harto, escuchando su cotorreo inútil como si hubiera pagado por terapia
La neta… perdí mi dinero.
Tal cual.
Literal.
Porque con Cinthia y Fabiola salgo bien descremado, temblando de piernas, viendo borroso, sin nutrientes, pensando en pedir suero oral.
Salgo con marcha de borrego recién nacido.
Con la suggey…
Salí más entero que como entré.
Ni un rizo fuera de lugar.
Ni una neurona confundida.
Ni una gota de emoción.
Por eso tardé en contar la anécdota:
porque todavía me dolía la decepción.
Llevaba MESES detrás de Suggey, la famosa suggey, y siempre estaba ocupada, o desaparecida como carta rara de colección.
Hasta que a inicios de noviembre, por fin, POR FIN, se me hizo.
Me sentí como si hubiera ganado un premio… y pues resultó que no.
Me meten al cuartito, prendo mi toque de mota para agarrar valor y en eso entra EL REFRIGERADOR HUMANO, tripona, sólida, con un perfume tan dulce que parecía que me estaba rociando jarabe para la tos.
Nomás entró y me dio un golpe de olor .
Y con actitud de cajera de Oxxo en su último día laboral me suelta:
—Aquí no se fuma, es una falta de respeto y se quedó ahí un rato a que el humo se fuera
Yo ahí nomás con los pinches cachetes y pecho lleno reteniendo el humo del pinche mega jalón que le di y con mi cara de nmms! primera vez que me dicen eso jaja normalmente me dicen saca sordo , onde la guardaste, ta buena etc .
Le digo que en el foro la recomendaban un chingo, que por fin me tocó cita con ella, que ya tenía rato queriendo…
Y la morra, bien seca:
—Ah, pues yo ya no manejo extras. Todo es con preservativo y se que perdere cliente, se me hizo una actitud culera la neta, por que no aviso antes de pedir una hora
Y yo dentro de mí viendo mi alma desmoronarse como galleta Marías en café.
Noviembre, día libre, yo ilusionado como idiota…
y me sale con esa.
Pero ahí no acaba.
Se pasó LA HORA COMPLETA con plática de sermón: de su vida, sus hijos, su rutina, , su vecina peleonera…
Yo ahí recostado pensando:
“Morra, vine por una experiencia de revista, no por consejos familiares.”
Termino y ya lo único que quería era irme.
Y todavía:
—Espera a que me bañe y te acompaño.
Yo sentado viendo el piso, harto, escuchando su cotorreo inútil como si hubiera pagado por terapia
La neta… perdí mi dinero.
Tal cual.
Literal.
Porque con Cinthia y Fabiola salgo bien descremado, temblando de piernas, viendo borroso, sin nutrientes, pensando en pedir suero oral.
Salgo con marcha de borrego recién nacido.
Con la suggey…
Salí más entero que como entré.
Ni un rizo fuera de lugar.
Ni una neurona confundida.
Ni una gota de emoción.
Por eso tardé en contar la anécdota:
porque todavía me dolía la decepción.