Ahí les va una verdad cruel, las putitas exitosas se dan el lujo de escoger clientes por qué tienen por montones, entonces eligen a los que les agradan más y a los que no les hacen alguna chingadera aún que sea sutil para que no vuelvan a pedir servicio, esa es la realidad, a los que les agradan más hasta su número personal para tenerlos como clientes sin intermediarios, pero bueno el prime de las mujeres en este negocio es más bien fugas a excepción de algunos incautos que pudieran llegar a enredarse sentimentalmente, las mayoría nos enfadamos de lo mismo a los pocos encuentros, habiendo tanta variedad. Siempre pero siempre habrá una más bonita y más joven.